"Nos sentimos bendecidos, agradecidos y muy felices de ser los abuelos de una preciosa niña, Charlotte Clinton Mezvinsky", expresó el expresidente estadounidense en un breve comunicado, tras el nacimiento en la noche del viernes del primer retoño de su única hija.
La propia madre fue la encargada de dar a través de las redes sociales la noticia de uno de los nacimientos más esperados del año en Estados Unidos.
Chelsea y su marido, el inversor financiero Marc Mezvinsky, residen en Nueva York, pero por ahora no han informado sobre dónde nació la niña ni de otros detalles.
Los Clinton, por su parte, se declararon este sábado "entusiasmados" de poder estar junto a ellos mientras dan la bienvenida a su hija Charlotte.
"Chelsea está bien y resplandeciente, Marc está henchido de orgullo. La vida de Charlotte ha tenido un buen comienzo", indicó Bill Clinton en la nota.
Chelsea Clinton, que pasó su adolescencia en la Casa Blanca, anunció el 18 de abril, en un acto de la Fundación familiar y sentada junto a su madre, una noticia que sus padres llevaban años esperando oír.
"Hillary quiere ser abuela más de lo que quería ser presidenta", confesó el expresidente Bill Clinton en 2010, cuando Chelsea se casó con Mezvinsky.
Desde entonces, tanto Bill como Hillary han aprovechado la menor ocasión para recordar a su hija y, de paso, a toda la nación, sus enormes deseos por tener nietos.
Chelsea y Marc, hijo de dos excongresistas, se conocieron de adolescentes a través de sus familias, estudiaron al mismo tiempo en Stanford (California) pero no se hicieron novios hasta 2005.
La hija de los Clinton, de 34 años, trabajaba hasta hace un mes como reportera especial para la cadena de televisión NBC y colabora con numerosas organizaciones, sobre todo la de su familia.
El 29 de agosto Chelsea, también a través de las redes sociales, anunció que dejaba la NBC para centrarse en su trabajo en la Clinton Foundation y en la maternidad.