En Japón, la compañía de ropa interior femenina Ravijour creó un sostén que sólo puede desabrocharse cuando la usuaria está enamorada.
La prenda, creada en conjunto con “especialistas de la sexualidad humana”, mide el ritmo cardíaco de la mujer que, tras mostrar cierto patrón en los latidos de su corazón, causa que el sostén se abra súbitamente. Esto último puede resultar un tanto inconveniente, pues existe la posibilidad de que suceda en un momento poco apropiado o que asuste a la pareja.
El análisis del ritmo cardíaco se lleva a cabo por una app para dispositivos móviles, pero no se menciona si la prenda femenina puede abrirse sin la necesidad de sentir mariposas en el estómago, así que, en caso de no ser posible, tomar un baño resultaría problemático. Los creadores aseguran que la prenda busca evitar encuentros sexuales no deseados así como proporcionar una prueba de amor verdadero, pero también podría crear momentos incómodos entre las parejas.
El invento presenta muchas incoherencias, pues para llegar a la prenda es necesario quitar la ropa que está encima, actividad en la que la mujer colaboraría de manera voluntaria durante un encuentro acordado. En fin, todo sea por la ciencia y el amor
Publicado por JUNIOR SAINT HILAIRE