EL TORITO ROMPE ESQUEMAS EN DALLAS Y FILADELFIA
Que con su música Héctor Acosta se encuentre hoy día rompiendo esquemas, preferencias y fronteras, es algo que por las muestras está a la vista de todos.
Catorce giras este año recorriendo el territorio norteamericano de costa a costa es más que suficiente para medir la penetración y popularidad de este artista que a diferencia de otros no se ha quedado en los límites
de la ciudad de Nueva York, y ha sido capaz de asumir el estandarte de nuestra música en conglomerados no habituales, como es el caso de los centroamericanos, mexicanos y bsuramericanos residentes en Dallas.
Acostumbrados como estamos a observar las banderitas dominicanas en los conciertos de artistas criollos que revelan la presencia de nuestra gente, se siente uno hasta extraño de no verlas.
En el club Medusa de Dallas, abarrotado a toda capacidad el pasado domingo, los únicos dominicanos eran El Torito y sus musicos.
La sala estaba llena de centroamericanos, suramericanos y mexicanos que coreaban las canciones del amplio repertorio de El Toritoa con un fervor y un entusiasmo que definitivamente ponen de relieve lo mucho que ese público ha seguido la trayectoria musical de este artista que ha alcanzado una dimensión insospechada.
Pero de igual modo el pasado lunes en Filadelfia había que estar allí para ver a los mexicanos no solo bailando bachata sino merengue.
"Primera vez que veo en mis bailes a mexicanos bailando merengue", comentó el Torito al bajar de tarima luego del baileconcierto que tocó en la discoteca Distric n9ne en el dowtown de Filadelfia.
El ambiente allí era puro mexicano, de gente consumiendo las cervezas Corona y Morelo, comiendo tacos y quesadillas, apegados a sus tradiciones y su cultura, pero abriendo espacio para nuestros ritmos, sustentados por un artista que se ha erigido en un multinacional de la música.
Que los mexicanos no solo admiren al artista en sus conciertos, sino que estén ya bailando nuestra música, como se puede apreciar en las ilustraciones fotográficas que acompañan este trabajo, constituyen demostraciones más que fehacientes del fenómeno de popularidad que encarna hoy día Héctor Acosta.
Mercados y plazas como éstas que ha venido recorriendo durante todo este año, mantienen esta agrupación con una agenda de ocupación permanente que le dificulta a muchos el conseguir fechas.
Este fin de semana concluye su décima cuarta gira a Estados Unidos en el 2013, quedando pendientes otros compromisos internacionales, para luegovenir a cumplir la apretada agenda de actividades de la temporada navideña, que como ya es proverbial, es la orquesta que más bailes toca.