La implacable represión policial desatada hace poscos días contra residentes en Maimón, Puerto Plata, es un atropello descomunal, con el que se violentan y conculcan todos los derechos de una comunidad a reclamar y proteger el espacio que le corresponde.
Policías y militares armados de escopetas, pistolas y otras armas de guerr, la emprendieron a plomazos contra inermes comunitarios que se manifestaban pacíficamente rechazando que Maimónm como Distrito Municipal, sea despojado de parte importante de su territorio, lo que pretende hacerse sometiendo un ante-proyecto de ley al Congreso auspiciado por el alcalde de Puerto Plata, Walter Musa.
Los agentes policiales y del Ejército la emprendieron a tiros contra los manifestantes que corrieron despavoridos ante las balaceras. Luego irrumpieron en por lo menos una vivienda sin autoridad competente ni orden judicial y sacaron por la fuerza a algunos de sus ocupantes, los arrastraron y golpearon, en algunos casos hasta sangrar.
Aquello fue una escena de savajismo, de violencia brutal, algo no propio de duna sociedad civilizada, como se supone es la nuestra, dondel el derecho a la protesta pacífica está consignado en la Constitución de la República.
El abuso rayó en lo inhumano y exige la atención de las autoridades competentes en procura de que situaciones como la referida jamás vuelvan a repetirse, porque se entiende que son propias de un pasado ya superado por la Sociedad Dominicana.
Las imágenes en video presentan la cruda realidad de la violencia que implantó el terror y el pánico en toda la zona...