El presidente estadounidense, Barack Obama,
recibió ayer en la Casa Blanca a los Miami Heat, con LeBron James y
Dwayne Wade a la cabeza, para felicitarles por la victoria en la pasada
temporada de la Liga Nacional de Baloncesto (NBA).
“Aunque estoy un poco disgustado de que los Chicago Bulls no lo consiguiesen, quiero dar la enhorabuena a los Miami Heat”, bromeó Obama en referencia a su equipo favorito.
En una abarrotada sala de prensa, Obama recordó los partidos de la serie final del pasado año en la que Miami Heat se impuso a Oklahoma City Thunder, e ironizó sobre la inusitada presencia de periodistas en la zona este de la Casa Blanca. “Para muchos de los equipos que vienen aquí, aquí hay demasiadas cámaras en un sitio. Es un poco abrumador. Pero para los Heat es como se ve un entrenamiento, es normal”, agregó el Presidente, conocido amante del baloncesto.
Obama recibió una camiseta con su nombre y una pelota de baloncesto firmada por los jugadores del equipo de Florida.
James, el mejor jugador de la liga pasada y estrella del deporte, se mostró algo nervioso en su visita a la residencia presidencial.
“Nosotros en la Casa Blanca, nosotros en la Casa Blanca. Mamá, lo logré”, afirmó James, de 28 años, al recordar que en el equipo hay jugadores de diferentes partes del país como Michigan, Alaska, Dakota del Sur u Ohio. Obama ha instaurado como tradición recibir a los equipos vencedores de diferentes disciplinas todos los años para estimular el ejercicio y el deporte entre los más jóvenes.
“Aunque estoy un poco disgustado de que los Chicago Bulls no lo consiguiesen, quiero dar la enhorabuena a los Miami Heat”, bromeó Obama en referencia a su equipo favorito.
En una abarrotada sala de prensa, Obama recordó los partidos de la serie final del pasado año en la que Miami Heat se impuso a Oklahoma City Thunder, e ironizó sobre la inusitada presencia de periodistas en la zona este de la Casa Blanca. “Para muchos de los equipos que vienen aquí, aquí hay demasiadas cámaras en un sitio. Es un poco abrumador. Pero para los Heat es como se ve un entrenamiento, es normal”, agregó el Presidente, conocido amante del baloncesto.
Obama recibió una camiseta con su nombre y una pelota de baloncesto firmada por los jugadores del equipo de Florida.
James, el mejor jugador de la liga pasada y estrella del deporte, se mostró algo nervioso en su visita a la residencia presidencial.
“Nosotros en la Casa Blanca, nosotros en la Casa Blanca. Mamá, lo logré”, afirmó James, de 28 años, al recordar que en el equipo hay jugadores de diferentes partes del país como Michigan, Alaska, Dakota del Sur u Ohio. Obama ha instaurado como tradición recibir a los equipos vencedores de diferentes disciplinas todos los años para estimular el ejercicio y el deporte entre los más jóvenes.